En el arado en tierra pueden emplearse tractores con neumáticos más anchos u orugas. De este modo se reduce la presión sobre el suelo en las capas más profundas y se evita la compactación. Asimismo, en el arado en tierra puede trabajarse con sistemas de dirección GPS. Esto procura un mayor confort al conductor y, al mismo tiempo, una conexión siempre exacta con el siguiente surco.
Ventajas de las ruedas direccionales delanteras
- Control de profundidad seguro en suelos no cultivados y sólidos
- Cambio manual solo necesario al modificar la profundidad de trabajo
- Accionamiento propio elevado